lunes, abril 12, 2021

Retomando vicios, viejos amores y virtudes...

Esta noche han regresado a mí las letras, o yo a ellas, no lo sé. 
Han regresado como los viejos amores que vuelven, de los cuales, el cuerpo y el alma tiene memoria.

Ayer me preguntaron "Y... ¿sigues escribiendo?", mi respuesta fue negativa y me pesó aceptarla.

Regreso a las letras, o ellas a mí, no lo sé, como regresan los viejos amores, esos de los cuales el alma y también el cuerpo tiene memoria, pero más el alma, porque el cuerpo cambia y el alma se hace cada vez más eterna.

Regreso a aquel antiguo amor, sin remordimientos ni miedos, como el que reencuentra un juguete de niño, su favorito, de los más preciados. 

Regreso a las letras que por mucho han sido mi más fervoroso amor, me entrego a ellas, deseo que me quieran de vuelta, como se desea que regrese el primer amor.

ESCÚCHESE: "Me haces tanto bien", Amistades peligrosas.

jueves, agosto 03, 2017

De la importancia de las los buenos hábitos y buenas costumbres.

Mi manía por escribir de madrugada me es inherente, somos una. Toda mi vida, desde que recuerdo, he sido más productiva por las noches, y hasta la fecha. Lo cual, es una pena porque mi trabajo se aplica por las mañanas. Después de tantos años, sigo sin acostumbrarme a levantarme temprano, nunca lo haré, supongo.

Confieso que conforme han pasado los años, he perdido los buenos hábitos de la escritura, eso sí, mi ortografía ha mejorado. Bastante. Pero eso no justifica mis silencios aquí entre pixeles y allá por el papel pero en mis letras. No me justifico, pero de unas semanas para acá me he venido haciendo a la idea de revivir viejos hábitos y buenas costumbres, como el escribir, que, en algunos momentos, confieso me era un vicio, uno de mis vicios más decentes o confesables, casi casi exhibibles.

Regreso a uno de los conceptos que tanto me gusta "Tiempo", tiempo que mide al hombre pero el hombre sigue creyendo que mide al tiempo. Tan grande el concepto y lo bajamos a eso, un concepto y pasa a ser sólo eso, tiempo. 

Tan relativo, tan preciso, tan volátil, tan exacto.

Tiempo para dormir, tiempo de soñar, tiempo de y para, pero no hay, nunca hay, sin embargo es.

Supongo que sólo a través del sueño es que se desafía el tiempo, del sueño y los sueños. Y las drogas, porque es el efecto que se busca, alterar la realidad es alterar el espacio y tiempo, sobre todo el tiempo.

Ahora entiendo mi obsesión con el tiempo y el sueño y la noche y el silencio.

Todo es tan relativo. 

ESCÚCHESE: Pulsar, Gustavo Cerati.

viernes, diciembre 09, 2016

Día 9 de diciembre de 2016, o "después del 8".

Ayer fue 8 de diciembre. ¿Qué tiene de especial aparte de ser cumpleaños de Jim Morrison, el "Rey lagarto"? Pues que se conmemora un mes más del fallecimiento del hombre que, en mi vida, es la medida de todos. Mi primer amor y el amor de mi vida. 
Se cumplen 11 meses que han sido de todo, menos sencillos. 11 meses de un funeral que no hubo y luchar con la memoria, razón y lógica para asimilar una muerte que sigo sin entender, claro, si en algún momento es que la muerte es entendible. Pero bueno, lo es, lo fue y ya. Y sí, ayer fue 8 y fue un día más, común, haciendo lo que se hace en un día común de diciembre, un día hábil, un día con amigos, trabajo, escuela, familia, frío, cólicos, café, un celular de pantalla estrellada y tacos... pero con recuerdos que ya no son tristes. Que puedo vivir en armonía con ellos, convivir con ellos y disfrutarlos. Que ya no causan dolor, que son heridas de guerra, y donde ya puedo mencionar su nombre y contar recuerdos vívidos sin que las lágrimas broten inevitablemente. Ya puedo hablar de él como un muerto y de los recuerdos, como algo eterno y etéreo.
11 meses, curiosamente el 11 siempre jugó un papel importante en nuestras vidas. 11 días, 11 años, 2011 y ahora 11 meses. Ya pasó el primer cumpleaños, suyo, mío, Día de muertos, viene la primer Navidad, Año nuevo y listo. Se cumple un ciclo, y la gente que sabe, dice que lo que más se reciente es el primer de todo. El primer año. Y bueno, comienza la cuenta regresiva para todo eso. Y aunque sigo siendo incapaz de borrar su número de mi celular, ya sé que no hay respuesta del otro lado de la línea sin importar las veces que suene o vuelva a marcar. Que si voy al 1120 de la González y Pichardo, no me va abrir la puerta y nada de lo que hay ahí me será familiar. Ni siquiera el árbol de romero que plantó su abuelita y que tanto me gustaba. Nada. Sin embargo, él sigue estando en medio de muchas, por no decir todas las canciones. Algunas más que otras. 
Tampoco soy capaz de releer sus cartas ni de ir a un concierto de Caifanes. Creo que eso, junto con visitar una tumba con su nombre será la prueba de fuego, pero para eso falta, y no un mes ni unos días. Falta tiempo, y el tiempo es taaan relativo.
Estos 11 meses han sido todo menos sencillos, ya lo dije. por él y su repentina partida, sinusitis y algunas otras cuestiones muy ajenas a mi voluntad y la de mis seres queridos.
A modo de reconocimiento, si es que puede llamársele así, reconozco que sola no he estado. Agradezco con toda mi alma a quienes me han ayudado en este paseíto por mis infiernos. Y el mundo debería saberlo, que hay personas que te regalan de ellas para acomodar un corazón apachurrado, que apapachan, que acarician con el alma a través de palabras, música, alcohol y su mera compañía.

G ha sido mi ángel guardián en las noches más oscuras y a lado de mis peores miedos y mejores demonios. Y soy completa con ella y todo está bien, sin importar que tan mal esté sé que reiremos juntas. Sabemos nuestros demonios y nos divertimos con ellos. Entre el tramadol y ella, me quedo mil veces con ella. Es ella el mejor de los sedantes e inhibidores de dolor que he conocido. Es ella la Amapola, de donde nace la morfina. También es ella la mejor de los estimulantes, como una hoja de coca para el alma. Es ella el mejor de los enteógenos.* 

A es con quien hablo de muerte y demonios y entiende proporciones, medidas y tallas. Es con quien hablo y todo parece insignificante, no me siento ajena ni sola porque parece entenderlo y hacerlo tan natural. Parece que todo lo entiende, que todo lo soporta, que nada lo tumba, quizá sí tiene algo de Job. Él es mi guía en mi propio infierno, a quien le puedo confiar mi alma, mi Virgilio.

C es un ser sin tiempo ni espacio que hace que el tiempo se pare, ya sea en el desierto de Altar, Sonora, el tráfico de LA o San Bernardino, CA o sobre algún escenario sin pronunciar palabra... Y también lo regresa, porque me dio la oportunidad de asistir a un funeral póstumo, de vaciar el alma entre música mágica, cerrar ciclos juntos y sacar lágrimas atoradas de 5 meses en su hombro y darme La Cura. Ese hombre juega con el tiempo, quizá por eso es músico y me ha regalado música desde hace años. Propia y de otros, pero siempre suya. Él y su familia, me han regalado momentos precisos en momentos exactos. Él es la melodía más armónica y también quien la hace, es mi Orfeo que aplaca y libera mis miedos, que me lleva a la catarsis, a veces, sin necesidad de palabras.

A cabo del tiempo uno se da cuenta de tanto y mucho, a veces sin querer o sin ganas de que sea cierto, pero las personas se van, no se quedan cuando se apagan las luces y la cosa se pone fea. Y bueno, aunque he sido afortunada y desde lugares donde jamás imaginé, me ha llegado esperanza, consuelo, ánimos y todas esas palabras bonitas que nos hacen salir de donde a veces no podemos, hay gente que se queda y alienta en la peor de las tormentas. Sin estos 3, mi familia y las pláticas, que en algunos casos fueron casi reclamos a la divinidad, no estaría de este lado del 11 y del 8.

Ellos bajaron conmigo a mis infiernos, a su voluntad, la mía, la de las circunstancias o momentos, pero bajaron conmigo, y es por ellos que estoy de regreso sobre la Tierra y viviendo una vida entre vivos, con ganas de todo, sin miedo a nada. A la expectativa y en la realidad. 

Desearía tener el poder de mandar hacerles una constelación, nombrar un océano con su nombre o que existieran muchos de ustedes en la vida de todos los que los necesiten, no creo en santos, pero si debo rezarle a alguien para que interceda por mí, es a ustedes, cada día, después de cada día 8, es su santoral. El mundo debe de saber que existen, sus poderes y de lo afortunada que soy al tenerlos en mi vida.

Gracias.

*NOTA:Un enteógeno es una sustancia vegetal o preparado de sustancias vegetales con propiedades psicotrópicas que cuando son ingeridas, provocan un estado modificado de conciencia. Se utiliza en contextos espirituales, religiosos y rituales chamánicos. También tiene usos recreativos, lúdicos o medicinales.

lunes, agosto 01, 2016

Agosto.

Hoy ya es agosto y con él comienza el recuento de mi año, estoy a unos días de mi cumpleaños. Anoche, cuando vi la fecha en la pantalla de mi celular, 01 de agosto de 2016, me entró una nostalgia terrible. Y sinceramente no por mí o por la edad o por lo que va del año, que ya ha sido bastante. Sino porque será mi cumpleaños y no recibiré la llamada, el mensaje y mucho menos la visita como había venido siendo desde hace 16 años. 
Por 16 años fuiste una persona fundamental en mi vida, ahora debo acostumbrarme a que eres un recuerdo. Y me aterra el llegar a confundir la realidad con la ficción y ya no saberte dónde empiezas o terminas y comienza mi desvarío, y es que eras tan perfecto. Por eso te amé hasta el cansancio aunque nunca me cansé.
No podré agradecer las lecciones de vida que me diste, al menos no todas, algunas sí alcancé a agradecerte en vivo, en vida. Por eso mismo te dije "te quiero" todas, absolutamente todas las veces que me fue posible, y sé que no te quedaba duda alguna de qué tanto te quería, te quise y te voy a querer siempre. Porque hace unos meses, 6 para ser exactos, te convertiste en eterno y así mi amor por ti. ¿Por qué sigo escribiendo como si me fueras a leer? La costumbre, como también quererte llamar para contarte algo, buscarte, enviarte un mensaje, un correo, alguna imagen graciosa, verte en todas partes y escucharte en todas las canciones. Eres eterno, etéreo y omnipresente. Siempre en donde sea, en todas partes, hasta en los lugares que jamás estuviste ni estarás, sin embargo, estás. 
Seguiré escribiendo de ti como si fueras la mejor de las epopeyas, eres épico en mi vida. Eras mi diablo y el mismísimo vientre del cielo. Son tus ojos el mejor lugar donde he estado y donde quisiera pasar la eternidad misma. Entre el volcán y tus ojos, ese es mi paraíso. Ahí quiero mi eternidad y todas las que me sean posibles.
Teníamos planes para agosto, Tlanixco, Metepec, el volcán. Ahora sólo son recuerdos del futuro juntos, como tantos otros. En la próxima vida, nos encontraremos. Nuestras almas están unidas por algo más fuerte que la razón, la distancia, los cuerpos y el mismo destino.
Tanto, tantísimo espacio y encontrarnos sin buscarnos, 16 años de todo y nada, de tanto con tan poco.
En la próxima vida, por ahora, te espero en mis sueños.

ESCÚCHESE: Puente, Cerati. Una de tantas canciones nuestras.

miércoles, junio 08, 2016

"The Cure" como la cura.

Hacía tanto que no escribía que ya se me olvidó usar las letras para exponer mis ideas, y bueno, no sé bien por dónde comenzar.

Hace meses sufrí uno de los episodios más caóticos de mi vida hasta ahora. La pérdida de uno de los seres que más he amado en toda mi vida. Al único que le juré amor eterno y bueno, aún después de todo, sigue vigente.

Ninguna pérdida es divertida, a menos que sea de la razón, pero qué pasa cuando esa pérdida te hace perder la razón a momentos...?

Debo confesar que no han pasado ni 5 meses y la distancia que en algún momento fue la misma que nos hacía fuertes y grandes, es la misma que poco a poco me iba consumiendo. Los recuerdos, los momentos, las canciones, lugares, fotos, imágenes conservadas en el ámbar de la memoria, detalladas, específicas, completas. Mis manos, mis ojos, mis letras, todo, absolutamente todo me recuerda a ti, dolorozamente a ti. A tus gestos, tus palabras, tu voz, tus reacciones, movimientos y esos ojos donde podía perderme la vida entera, porque contigo, un segundo, un día, un momento, me llegó a significar la vida entera. Contigo comprendí los tiempos perfectos, el tiempo, la distancia, todas esas cosas que se miden pero no se entienden porque forman parte de la sincronía de la vida. Y bueno, me dolías, por todas partes y en todos lados.

The Cure, Morrissey y Cerati, tu trinidad musical. Todo comenzó con un regalo adelantado para ir al Hollywood Bowl a LA y ver a "The Cure" en ese lugar que de por sí es ya mágico. El día llegó. Y, con más miedo que emoción, comenzó el viaje. Más que viaje de paseo fue un viaje de vida. Como tú. Mi miedo era desmoronarme en el momento de escuchar las canciones con las que hicimos nuestra historia. Terminar partida en mil pedazos que no sabría cómo juntar porque sólo tú y tus brazos eran la solución. Pero ya no estás, no estarás. Nunca.

El día transcurrió lento, tibio, entre palmeras de Los Ángeles y pláticas en spanglish. La hora llegó, tiempo de desafiar la marisma del tráfico angelino. LLegamos. Y comenzamos a subir... nunca tan alto caí... La tarde caía entre los cerros, el frío se hacía sentir y el anuncio de HOLLYWOOD estaba perdiendo su esplendor entre las sombras de la noche... y todo comenzó.

"Plainsong"... "Pictures of you"... creí que lloraría, pero no. La adrenalina todavía era dueña de mí. "Closedown". "A night like this". "Push" y todo bien. "In between days". "Last dance"... todo va bien, no pasará nada. Comencé a tener más confianza y disfrutar más... "Lullaby". ¡Sobreviví y cómo la disfruté! "Fascination street". "The end of the world"... sigo completa, o lo completa que estaba hacía meses. "Love song", prueba de fuego. ¡Superada! "Just like heaven"... flashbacks, flashbacks, recuerdos vívidos y momentos del ámbar del corazón. Me siento y llega a mí un silencio, en medio de miles de gentes, a lado de uno de mis mejores amigos, estoy en silencio, me siento sola. "2 late". Mis ojos se convierten en agua y mi alma se derrite. Lloro. Y lloro con ganas. Con muchas ganas, mucha prisa y mucha necesidad. Ese llanto atrapado desde hace meses, acumulado y pesado. Ese llanto que se llora en un funeral. Estoy quebrada. Lloro y sigo llorando. Como nunca, como se le llora a un muerto que se tiene enfrente. Mi amigo me abraza y consuela sabiendo que ese dolor no es consolable. Creo haberle llenado de mocos o lágrimas la chamarra, y no importa. Sigo llorando, desconsolada, pero... se siente bien, muy bien. Catarsis, vaciar el alma. Tener ahí las canciones vivas, así como los recuerdos, completos. Míos, tuyos, nuestros. Saberlos míos. Los viví, nadie me contó lo que sentí y vale la pena, valió totalmente la pena, el dolor, las risas, el llanto, la alegría, el amor. En ese justo momento cumplí mi promesa. Mi amor por ti, finalmente se convirtió en eterno. Las canciones siguientes son como una epifanía. "Trust". "Want". "One hundred years". "Desintegration". "It can never be the same". "A forest". El llanto dejó de fluir y viene la mejor de las calmas, la paz es declarada y me dedico a disfrutar lo que queda de "The Cure", porque sé que al finalizar el concierto será como haber cerrado tu ataúd, haber puesto un punto a la historia escrita y comenzar de nuevo, más libre y comenzar a cicatrizar. "Shake dog shake" y más canciones movidonas siguieron dejando ligeramente de lado la melancolía a punto que "Lovecats" me hizo bailar y al final, "Boys don't cry", selló mi epifanía.

Desde ese día, 22 de junio, mis días sin ti han sido tranquilos, te recuerdo de vez en vez, saltas a veces entre canciones y los recuerdos de ti a veces me sorprenden entre mi ciudad. Sin embargo ya no dueles, te he soltado. Ya no tengo miedos. Te convertiste en eterno. Te amo.

Escúchese: 2 late, The Cure, una tarde de domingo en el Hollywood bowl, con todo el sentimiento, la melancolía y ganas del mundo, como se debe escuchar a "The Cure".           


lunes, octubre 05, 2015

Un, dos, tres por ti y todas tus letras.

Me moría de ganas porque llegara el frío y escribirte poesía. Ahora que llegó el otoño y su frío, no sé qué es prudente decir. Me parece que he usado todas las palabras posibles antes de conocerte, y el significado de ellas no me es suficiente para decir lo que tenga que decir de ti.
Suspiro y pienso si quedan nombres nuevos para nombrarte y adjetivos que regalarte. Ya entendí que las palabras no se pueden inventar, pero el lenguaje puede ser reinventado, y con ello la vida misma. 
Por primera vez en mi vida no tengo miedos. Has resignificado mis días y con ellos las palabras, las cosas, los significados y sobre todo los nombres.
Aquellas palabras que fueron intocables hace algunos años, ahora son mis favoritas. Y no, no por los recuerdos, sino por lo que ahora, en este preciso momento evocan. Tú.



Escúchese: Loco, La Castañeda

martes, junio 02, 2015

-

Quiero regresar al anonimato.

Escúchese: mi silencio.

martes, abril 07, 2015

Establemente vulnerable.

Es preciso para entrar aquí que mi caos renazca. 
Ya no escribo, al menos aquí y, siendo sinceros casi en ninguna parte, no porque ya no tengo nada que decir, expresar o exhibir, sino porque cuando uno crece le pierde el gusto a sentirse vulnerable. 
Nos han enseñado que la estabilidad lo es todo, en cualquier ámbito de nuestra vida, cualquiera, pero estabilidad. Estable. O al menos aparentarlo.
Emocionalmente soy estable, sí, mi subebaja-carrusel-montaña rusa de emociones es el mismo de siempre, estable, nada que quien me haya leído hace algunos años no conozca.
Lo siguiente, la adrenalina... ya le he bajado, claro, los niveles de adrenalina que manejo no es que sean distintos, es que son en diferentes ámbitos de mi vida que me es mejor no mencionar. Bueno, después de todo si los mencionara perderían cierto sentido.
Y bueno, en cuanto a cuestiones de amor... sigo siendo la misma. Esa que le encanta ser cazador y luego no sabe qué hacer con la presa y se convierte en ella. 
Mi música no ha cambiado tampoco, y, es que soy bastante celosa de mis gustos viejos y establecidos por mí misma. Mis libros, mi esto y mi aquello...
Sin embargo soy tan diferente, tan vulnerable y tan estable. Han pasado más de 10 años que estas letras fueron echadas al océano intermitente de la red. Más de 10. Serán 12.
Cuántos momentos, errores, aciertos, alegrías, amarguras, lágrimas, sonrisas, silencios, vacíos, noches sin sueño, errores ortográficos, amistades y amores, sobre todo amores han pasado. Tengo la ligera sospecha de que me gusta enamorarme para darme en la madre, porque es cuando más productiva me vuelvo... pero, ajá, pero, por lo mismo me mantengo alejada del amor. Pues claro, ¡para no darme en la madre! Ves, si pendeja no soy.
Me muero de risa por la ironía de todo esto. Ahora, en este preciso momento me comienzo a sentir vulnerable ante ti, a ti que lees esto. Y aun si no lo lees, me piratié por algo que no pasaría y me sentí vulnerable. Dejé de escribir. Cambié mi atención. Ya no escribiré. Al menos de esto.


ESCÚCHESE: Simple minds, Don't you (Forget about me)




sábado, enero 25, 2014

TODAS.

Todas, leáse, TODAS las canciones siguen siendo dedicadas para él. Mi música es suya. Aún la que todavía no existe. 
Y a veces, casi siempre, también los silencios.

ESCÚCHESE: Hoy tienen la libertad de escuchar la canción que Ud. gusten, porque todas son para él.


martes, agosto 06, 2013

Ya va siendo hora...

Ya va siendo hora de hacernos menos y más ligeros.
Me aligero el viaje a mí misma y te dejo libre. Te doy toda la ventaja y ya no te la quito.
Me juro a mí misma ni siquiera voltear. Aunque eso no quiere decir que deje de querer hacerlo.
Ya va siendo hora de hacernos menos aquí en mi cabeza y entre mis recuerdos.
Ya va siendo hora de hacernos menos.
No. ¡Ni soy Penélope, ni quiero ser Odiseo y tampoco se me antoja ser Calipso, fíjate!

ESCÚCHESE: Un millón de años luz, Soda Stereo

jueves, julio 04, 2013

Lo admito.

Pasan los años y me sigue gustando coquetearle al diablo mientras le pido misericordia.

ESCÚCHESE: No dejes que..., Caifanes.

martes, junio 25, 2013

drama.

No sé si soy yo o es que todo me hace recordarte.
Debería ser fácil terminar con esto y arrancarme la memoria, la razón y el olvido.
Aveces, no siendo tan dramática, esto es parecido a vivir-muriendo-lentamente.
Sería más fácil no dormir en unas semanas, moriría de insomnio y curaría el olvido.
¡Por Dios, qué dramática ando!
Fue la luna llena.

ESCÚCHESE: Luna roja, Soda Stereo.

lunes, junio 24, 2013

"Me sirve cualquier pretexto, cualquier escusa, cualquier error..."

Oficialmente es verano y mis letras cada vez fluyen con más fluidez. Al parecer, me estoy curando del silencio de mis palabras y eso me hace muy feliz.
Como cada verano me haces falta. Y tal parece me seguirás haciendo falta hasta que comience el otoño y entonces me acostumbre de nuevo a tu ausencia, te guarde luto el invierno y ya en primavera renazcan mis nuevas esperanzas. Y así, de la manera más predecible, me convierto en el Ave Fénix de tus recuerdos que ya son míos.

Ayer y antier, pisé suelos donde hacia años no estaba. Y la última vez que estuve fue contigo. Juntos. Fusionados en un abrazo del alma que me parecía interminable. Y sólo ha sido intermitente. Tal parece que todo es finito, menos esta inmensidad de nostalgia por ti.


ESCÚCHESE:  Magia, Cerati.

lunes, junio 17, 2013

De mi esquizofrenia nocturna y otros amores...

De esas noches que no se duerme. Hoy es una de ellas. Y aunque se duerma no descansará el alma hasta que exhiba unos cuantos de mis adorados daimons
No sé cómo estructurar mi pensamiento sin sonar tan loca. Debo seguir pensando en alguna forma. No me es conveniente soltar las letras así nomas. No. No esta vez.
Sólo diré una cosa.
De ti, nacen galaxias y mil universos todos los días.

Eres mi Calipso. Contigo, soy la dualidad. A veces Odiseo… a veces Penélope. 

ESCÚCHESE: Half moon, Janis Joplin.

sábado, mayo 18, 2013

Efecto doppler

De esas noches que de la nada te despiertas en la madrugada y te vas directo a buscar sus viejas cartas para releerlas y saber esos sentimientos intactos y esta distancia vigente.
Mismas cartas que periódicamente y tarde o temprano, te escondes entre los mismos libros y con los ojos llenos de lágrimas...

Te amo.
No "después de todo" sino antes que a nada.
Te amo.
No "más que a alguien" sino como a nadie.
Te amo.
No "mucho" sino inmesurablemente.
Te amo.
No "aun" sino siempre.
Así nomás.
Te amo.

ESCÚCHESE: Efecto doppler, Soda Stereo.